En el Colegio de Abogados de La Matanza, la consejera y Presidente de la Comisión de Fortalecimiento Institucional y Planificación Estratégica, Silvia Bianco, encabezó la Jornada sobre “Lenguaje Claro y Justicia de la Ciudad”. La actividad contó también con la disertación de la Jueza de primera instancia de la CABA, María Lorena Tula del Moral y la Asesora lingüística Mariana Bozetti, perteneciente a la Dirección General de Capacitación y Escuela del Ministerio Público Fiscal de la Nación.
Durante su exposición Bianco manifestó que el Acceso a la Justicia “es uno de principales derechos de las personas”. En ese sentido, la consejera explicó en qué consiste el Programa Equidad Territorial y detalló que el mismo tiene por objetivo principal, fortalecer el acercamiento de la Justicia a la Ciudadanía y pretende esclarecer conceptos jurídicos para una mejor comprensión de los procesos judiciales por parte de los ciudadanos.
La representante del estamento legislativo expresó que Lenguaje Claro “no es nada más ni nada menos que utilizar un lenguaje desarticulando el tecnicismo”. Y agregó: “Tenemos que empezar a utilizar un lenguaje que la gente pueda comprender. Creemos fehacientemente que una vez que la ciudadanía sepa y entienda de que se está hablando en un ámbito judicial, tiene una manera diferente de plantearse hacia la vida y esa es una de las metas que tenemos”.
Además, la Presidente de la Comisión de Fortalecimiento Institucional y Planificación Estratégica del Consejo, describió los antecedentes previos que la llevaron a impulsar el Programa de Equidad Territorial: “una encuesta de acceso a la justicia que se hizo en el año 2012 comprobó que la mayoría de los ciudadanos encuentra dificultades en la comprensión del lenguaje utilizado en la Justicia, y que al menos algunas veces le genera desconfianza”. Y continuó: “El 65,5% de la población respondió no conocer la localización de alguna dependencia judicial de la Ciudad de Buenos Aires”.
La funcionaria hizo énfasis en el Programa Equidad Territorial y puntualizó sus principales ejes: Inclusión curricular de una unidad vinculada al Poder Judicial de la Ciudad de Buenos Aires; Lenguaje Claro a través de la elaboración de un Glosario Jurídico y el desarrollo de una app como herramienta de búsqueda para identificar, entre otros, delitos, contravenciones y los diferentes espacios de denuncia, asesoramiento e información. Asimismo, destacó que el ingreso en la programación escolar permite que los niños “conozcan sus derechos, estén preparados de otra manera y puedan cambiar la realidad que tenemos”.
Por su parte, la Asesora lingüística perteneciente a la Dirección General de Capacitación y Escuela del Ministerio Público Fiscal de la Nación, Mariana Bozetti, recalcó que “las características del discurso jurídico tienen que ser la claridad y la concisión”. En ese sentido, la especialista remarcó que “la oscuridad del lenguaje genera una distancia con la ciudadanía y provoca una paradoja”. “La ciudadanía confía en los abogados ya que son quienes tienen el conocimiento y el poder. Pero esa confianza se debilita y genera un efecto de distanciamiento ante la falta de comprensión”, enfatizó.
Además, Bozetti explicó: “Cuando el jurista no puede comunicarse de manera directa con la ciudadanía y necesita un intermediario esa responsabilidad recae en el periodista”. Y concluyó: “De esta forma se pierde el poder porque la interpretación queda en manos de otros. El lenguaje claro propone que no se necesite un intérprete”.
Al hacer uso de la palabra, la titular del juzgado N°13 del fuero Penal, Contravencional y de Faltas de la CABA, María Lorena Tula del Moral, detalló el trabajo que se viene realizando en el juzgado a su cargo en referencia al Lenguaje Claro. La magistrada expuso que “los abogados y operadores judiciales utilizan un lenguaje técnico y antiguo, con palabras del latín y términos difíciles que la gente no llega a comprenderlos” y que por ende resulta necesario que “todos los operadores judiciales empiecen a pensar en hablar más fácil y más sencillo porque en definitiva hay que acortar la distancia existente con la ciudadanía en general”.
La jueza porteña indicó que “si como abogados se quiere tener éxito hay que tratar a la víctima e imputado de igual a igual”. Al mismo tiempo, recordó que la Ciudad de Buenos Aires “adoptó un sistema acusatorio en el proceso penal y justamente este régimen es poseedor de tres pilares fundamentales en las que está la oralidad, la inmediatez y la publicidad”. “Para resolver los conflictos la oralidad es un valor fundamental”, dijo. “A través de la misma se resuelven las cuestiones en mi juzgado. Todo lo previsto se resuelve de esa manera”, finalizó.
La actividad contó con la presencia de la Secretaria de Coordinación de Políticas Judiciales, Gisela Candarle y el Jefe de Departamento de Implementación de Lenguaje Claro, Lucas Koch, entre otros. Al finalizar la ponencia, se entregó un ejemplar de la Constitución Comentada de la CABA y otro sobre la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.